Un último
beso a tus calles, Cluj
una última
caricia de mis ojos
a tus
murallas.
Suena
el rumor de tus bosques
en tu música
Toduță,
Țürk, Țăranu
Pop, Țună,
Murariu.
Habla
tu historia
de
sangre y fronteras
de
reinos e imperios
pasiones,
pensamientos, iluminaciones
en los
ojos de tu gente
en sus
rostros, en sus rasgos.
Se oye
tu pasado
en las
voces onduladas
que
pueblan el aire.
Tu
presente
rompe
murallas
alza
barreras
y sana
heridas.
Vibras,
Cluj, y reverberas
con eco
largo.
¿Cuándo
terminas, y dónde?
Tus límites
no se ven
aunque
tu ausencia se sienta.
Resonarás,
persistente,
más allá
del bosque
más allá
de la razón.
Aun así,
largo
se hará el tiempo
sin
besar con mis ojos las calles
sin
tocar los muros
sin
sentir las voces
de
Transilvania.
© Agustín
Fernández 2018